Hoy he vuelto a la casa
que fue tuya y mia,
donde fuiste mi principe
de mi amor y mi vida...
Hoy he vuelto a la casa
que, en silencio sumida,
la mortaja del tiempo
en el polvo envolvia.
Todo estaba lo mismo
como en tu partida
solo que sehojadas
habia rosas marchitas.
Y tu tristeza, tristeza
con presencia de herida,
de la herida insondable
de la casa vacia.
Hoy he vuelto a la casa
que fue tuya y fue mia
y que es nicho, tan solo,
de tu amor y mi dicha.
P.D.M.A
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