domingo, 10 de mayo de 2009

Tu cristal me traspasa
mi miras a través de él
me recorres con el murmullo de tu silencio,
la estructura de tu cuerpo me sonríe,
huyes de tus pies
para posarte en los mios
y ahora por fin
tu mirada me abraza,
te siento,
me sientes,
me envuelves entre tus venas de sangre negra,
me besas con la pasión de tus piernas,
con la dulzura de tus hombros,
me tienes,
te tengo,
me llevas,
te llevo,
para extinguir mis sentidos
en el susurro de tu voz.

1 comentario:

bárbara laikatar dijo...

muy bello poema, pero no tiene nombre.. esta muy lindo, sencillo y muy dulce.